Análisis de Ball X Pit para PS5 – uVeJuegos.com


Llevo avisando desde junio, cuando con motivo del Steam Next Fest pude probar la demo de Ball X Pit. Este es un título en el que se pueden apreciar los factores más importantes de cara a todo jugador: una experiencia divertida, peculiar y que hace que se te pasen las horas jugando sin darte cuenta. El trabajo de Kenny Sun ya está a la venta para PlayStation 5, Xbox Series (está en Gamepass), Nintendo Switch y Steam. Así mismo cabe mencionar que la versión nativa para Nintendo Switch 2 estará disponible próximamente.

¿Qué es Ball X Pit y qué hace tan especial al juego?

La ciudad de Bolabilonia ha caído, y lo único que queda es un gran foso en el que debemos adentrarnos poco a poco para acabar con el mal que allí nos espera, con el fin de recuperar recursos y volver para reconstruir el lugar. Fin de la historia, ya no hay más narración que valga, ahora empieza el gameplay. A grandes rasgos tenemos un título en el que debemos ir disparando bolas a los enemigos que se acercan sobre nosotros. Tenemos un escenario en constante movimiento por el que podemos movernos, mientras que vamos acabando con los enemigos que caen desde la parte superior. Ahora bien, al acabar con estos enemigos vamos obteniendo experiencia que nos hace subir de nivel durante la partida, lo que a su vez nos premia con bolas especiales, así como otras habilidades que se generan de manera aleatoria. Además todos los niveles incluyen particularidades y enfrentamientos contra dos subjefes y un jefe final. Esto se podría considerar como una mezcla de conceptos de títulos como Arkanoid, o incluso Puzzle Bobble, a lo que se pueden sumar conceptos de obras como Vampire Survivors o incluso Plants vs. Zombies.

A medida que subimos de nivel durante las partidas se nos ofrece un abanico de bolas o habilidades que ir adquiriendo, de manera que en cada partida podemos conformar un equipamiento diferente. Existe la posibilidad de obtener varias de una misma para así potenciar sus habilidades, pero también existe la opción de fusionarlas para crear opciones aún más curiosas. Hay bolas que atraviesan enemigos, otras que crean terremotos, las que atacan a toda una fila de enemigos al impactar, para robar salud, o para generar otras pequeñas bolas con cada impacto, entre muchas más opciones. A su vez hay habilidades para potenciar los impactos a los enemigos por determinado costado, para aumentar la velocidad, así como para potenciar su poder con cada impacto. Son múltiples las opciones, y cuando avanzamos en el juego vamos desbloqueando más. Las fusiones por su parte hacen que se sumen los efectos de dos bolas especiales en una sola, o que se generen otras con efectos nuevos. Experimentar y probar todas las posibilidades es algo realmente divertido.

Como ya hemos visto en muchas otras propuestas del género, cada personaje tiene como ataque base algunos de los movimientos (bolas en este caso) que se pueden obtener durante las partidas. Además de esto cada personaje tiene diferentes estadísticas base en lo referente a poder, velocidad y el resto de parámetros comunes que ya todos conocemos. Así mismo hay algunos que tienen particularidades especiales como aumentar su poder con cada rebote, o atravesar a los enemigos hasta que se toca el final de la pantalla, u otros más particulares como que las mejoras de subida de nivel se seleccionan de manera automática. Durante el juego se obtienen otras ventajas o posibilidades, como por ejemplo poder jugar una partida con dos personajes, de manera que se unen las habilidades de estos, pero hay otras opciones bastante curiosas que podemos ir descubriendo.

Un factor secundarios en el juego, aunque obtiene bastante repercusión de cara a la progresión es la reconstrucción de Bolabilonia. Al comienzo tenemos un pequeño terreno, en el que podemos comprar expansiones, pero lo más importante aquí es ir construyendo edificios con los que obtener recursos y beneficios constantes para nuestros personajes. Cada nivel del juego oculta diferentes planos que debemos recuperar, de manera que luego podemos crear estas estancias en Bolabilonia. Entre partidas podemos cosechar recursos y esto lo hacemos una vez más “lanzando” a nuestros personajes, en este caso. Al impactar contra las construcciones obtenemos los recursos o terminamos de construir los edificios, por lo que es algo que no debemos perder de vista entre partidas. Edificar correctamente, así como ir mejorando los edificios es algo que requiere algo de dedicación, pero compensa con el beneficio de poder mejorar nuestra progresión de personajes en la aventura.

En muchas ocasiones cuando valoramos un videojuego nos olvidamos de lo que debería ser lo más importante, y es que nos divierta o enganche a jugar. O al menos esa debería ser la misión de cualquier título de este mundillo del entretenimiento. Partiendo de esa premisa nos encontramos que Ball X Pit es un título sensacional, ya que es realmente sencillo ver cómo pasan las horas mientras jugamos sin apenas darnos cuenta. Cuando acabamos una partida siempre tenemos esa necesidad de volver a jugar otra para ver si completamos ese nivel que se nos resiste o conseguimos subir de nivel a ese personaje con el que estamos jugando. La progresión del juego ayuda bastante a esto, ya que nos invita a tener que jugar con diversos personajes en todos los niveles si queremos desbloquear los siguientes.

En lo artístico nos encontramos con una obra de aspecto clásico, siendo quizás este el apartado donde menos destaca la propuesta, aunque el rendimiento del mismo es bastante bueno, incluyendo esos momento donde las partidas se vuelven locas y tenemos decenas de bolas rebotando contra las paredes y los enemigos a la par que ofrecen un sin fin de efectos visuales. En lo sonoro tampoco hay mucho que destacar y las melodías acompañan la tensión de esos momentos en los que las fuerzas enemigas nos acechan.

CONCLUSIONES

Ball X Pit es uno de esos títulos que no muchos tienen en el radar antes de su lanzamiento y que con el tiempo se va convirtiendo en mediático. Un roguelike sencillo en mecánicas, pero que te incita a jugar una partida tras otra, ya que siempre puedes ir un paso más adelante. Su gameplay es muy simple, pero hay un montón de personajes con habilidades diferentes, así como los escenarios y las bolas que vamos equipando en cada partida hace que la experiencia siempre ofrezca algo nuevo. Sin lugar a dudas lo tiene todo para convertirse en uno de los títulos indie de este 2025.

Copia digital proporcionada por X.





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