Por supuesto, y como la conclusión del primer Fairy Tail no fue la más acertada, Koei Tecmo y Gust se han aliado una vez más para concluir, al menos por el momento, las aventuras de este grupo de personajes que marcó a toda una generación. Este Fairy Tail 2 sigue muy en la línea de lo que pudimos ver en la primera entrega, con algunos cambios en el sistema de combate para hacerlos más dinámicos, muy en la línea de los nuevos Atelier que están en camino, y para adaptar los sucesos del Imperio Álvarez, el último arco argumental del manga. Además, hay una historia completamente original escrita para Fairy Tail 2 que hace las veces de epílogo. En uVeJuegos llevamos varias semanas adentrándonos en el universo de Fairy Tail, y aunque en mi caso no soy su público objetivo al no ser un fan de la obra, si puedo valorarlo como juego de rol al uso.
El juego tiene un claro objetivo: contentar a los fans de la obra. Lo consigue, aunque como juego de rol al uso deja mucho que desear.
La conclusión del Imperio Alvarez
Porque una de las cosas que hay que tener en consideración con Fairy Tail 2 es que se trata de una continuación directa de la primera entrega. Es decir, cuando tomamos el control de nuestro personaje ya arrancamos sin ningún tipo de introducción. De este modo, os podéis esperar una introducción de lo más confusa si es vuestra primera vez en Fairy Tail, y aunque el juego pone todo de su parte con una enciclopedia de términos que también resume los acontecimientos de la primera entrega, tampoco consigue meternos de lleno. Mucho mejor está el desarrollo de personajes, que sin ser nada del otro mundo Gust se esfuerza en desarrollarlos e introducir dinámicas constantemente para apoyarse más en ellos que en la propia historia.
No obstante, Gust parece haber dado un paso atrás con la narrativa de este Fairy Tail 2. Es un juego de rol japonés de la vieja escuela, pero aún con todo, y al tratarse de la conclusión del arco, debería ser mucho más épico y apoyarse mucho más en las batallas intesas. Sin embargo, la narrativa de la aventura es muy perezosa, apoyándose completamente en los diálogos en forma de escenas a través de un motor que ya pide un cambio. Y tampoco lo hace mucho mejor cuando ha de mostrar el músculo en las batallas, ya que las luchas contra los Spriggan 12 tampoco destacan por encima del resto de combates básicos. Esto se debe a que sus combates son muy simples salvo por un par de habilidades a destacar, mientras que el resto son técnicas clónicas que hemos visto en peleas anteriores.
El sistema de combate ha llegado a buen puerto. Tiene su capa de complejidad e invita a explorar nuevos combos y posibilidades.
Una Fiore tan extensa con carente de vida
El desarrollo de la aventura es muy lineal, aunque en esta ocasión sí podemos movernos libremente por el mapa de Fiore sin pantallas de carga entre escenarios. Esto ayuda a mejorar la experiencia mientras nos movemos por esos caminos laberínticos que forman el Reino de Fiore, pero aunque el mapa sea muy grande, especialmente cuando todavía no hemos desbloqueado el viaje rápido, no deja de ser un camino totalmente lineal en el que podemos desviarnos de la ruta para recoger algún coleccionable o completar alguna tarea secundaria. Al respecto, hay misiones secundarias en prácticamente todas las zonas, pero no pueden ser más insípidas: es recadeo puro y duro. Ninguna de estas misiones aporta buena sub-trama, que por lo general quedan relegadas a diálogos que podemos desbloquear en las hogueras si hemos cumplido los requisitos previos, que suele ser la subida de nivel de cada integrante del grupo.
Por lo demás, a Fairy Tail 2 le cuesta justificar la extensión de su mundo, ya no solo por su excesiva linealidad, sino porque está totalmente desprovisto de vida y sobrepoblado de enemigos. Todos estos escenarios están totalmente vacíos a excepción de unos NPCs que aparecen una vez concluye la trama principal, al rededor de las primeras 15 horas, y que ahí si, Gust intenta poner todo de su parte para expandir el juego con contenido original. Al respecto, y aunque no podemos profundizar en su contenido, os podemos decir que el sistema de crafteo añade nuevas mecánicas, que el desafío se incrementa exponencialmente y que ya sí, podemos movernos libremente por Fiore, aunque tampoco haya mucho que explorar.
Todas las misiones secundarias carecen de interés; recadeo puro.
Una aventura sencilla pero con un interesante sistema de combate
En lo que respecta al sistema de combate, os vais a encontrar un título ligeramente diferente a la primera entrega. En esta ocasión, el sistema de combate por turnos clásico se echa a un lado para incorporar batallas en tiempo real formado por equipos de tres en los que podemos atacar cuando la barra del medidor de acción se haya cargado. Estos movimientos están delimitados por el medidor de acción que tengas, una barra que se rellena a medida que golpeamos con ataques básicos. Después, y en función de cuántas veces hayamos cargado la barra de acción, podremos invertir esos puntos en técnicas especiales que se pueden combinar entre sí. Esto es más interesante y complejo de lo que parece, ya que si bien cada una de las técnicas especiales conlleva un gasto de puntos, enlazar varias incrementa el daño de la siguiente, por lo que cuanto mayor sea el combo, más daño haremos.
Por supuesto, también podemos ejecutar ataques combinados entre aliados, aunque se deben dar las condiciones para ello. En el caso de los enemigos más comúnes, todos cuentan con un medidor de rotura que, si logramos romperla, podremos ejecutar un Link Attack, además de exponer las debilidades elementales al enemigo. Además, si logramos romper todas las barras del medidor de rotura del enemigo, podremos ejecutar un Unison Raid, un ataque especial con una animación dedicada y que, en función de qué personajes combines, podrás desbloquear ataques que no puedes conseguir con ningún otro.
El sistema de combate es muy interesante, aunque al mismo tiempo es un juego muy sencillo. No he llegado a los desafíos opcionales más exigentes, pero la historia no es mucho más allá que ejecutar ataques constantemente, romper las defensas del enemigo y lanzar los ataques combinados en el momento en el que estén disponibles. Además, al contar con tantos personajes en el grupo y la posibilidad de introducir al campo de batalla a los reservas siempre que queramos, logra que la dificultad disminuya enormemente. Esto, unido a que abundan las hogueras en el mundo abierto y que podemos utilizarlas para restaurar nuestra salud, simplifica mucho el desafío.
El sistema de progresión funciona mediante un árbol de habilidades que se bifurca en tres especializaciones (Habilidades, Fuerza y Espíritu) con los que podemos desbloquear nuevas técnicas y habilidades o mejorar las estadísticas de nuestro personaje a medida que subimos de nivel al derrotar enemigos y recoger nuevos ingredientes para el sistema de crafteo. La progresión es bastante simple y cada personaje cuenta con su propio árbol, pero debido a la enorme cantidad de personajes que manejamos se puede hacer algo pesado. Para ello, el juego nos permite que esta microgestión corra a cargo de la propia IA en función de si necesitamos unas habilidades u otras. Es una herramienta para que el jugador se pueda enfocar mucho más en la acción y dejar que el componente más JRPG corra a cargo de la máquina.
El equipamiento es también importante, aunque no tanto como la progresión. El equipamiento reduce todo su potencial a las Lacrimas, unos ítems que podemos conseguir desde el inicio de la aventura y que podemos tener varias equipadas por personaje, aunque sus características y bonificaciones varían entre ellas. En líneas generales, estos talismanes cuentan con su propio nivel y estadísticas pasivas, que incrementan en función de si las vamos mejorando o no. Realmente sus efectos solo tienen importancia en las dificultades más altas (hay un total de 4 niveles de dificultad), por lo que su uso es muy prescindible.
Por lo demás, el juego sufre de exactamente lo mismo que el primer Fairy Tail: el idioma. Las voces están en japonés respetando a los actores que les pusieron voz en la serie de animación, pero los textos están en inglés. Como curiosidad, durante mis primeras horas de juego tuve que jugarlo en japonés por un error que debería corregirse hoy mismo, cuando el juego llega a las tiendas. Por lo tanto, y salvo que domines el idioma de Shakespeare, te será relamente difícil adentrarse al universo de Fairy Tail 2.
CONCLUSIÓN
En un año tan prolífico en lo que respecta al JRPG con juegos tan increíbles como Persona 3 Reload, Final Fantasy VII Rebirth, Dragon Quest HD-2D Remake o Metaphor: ReFantazio, es difícil que un juego como Fairy Tail 2, que no deja de ser un juego de rol de la vieja escuela que no aporta nada nuevo al género, asome la cabeza. Es un juego con muchos peros que tropieza en lo más esencial, entre ellos la barrera del idioma, pero que tiene como único objetivo contentar al público que disfrutó y sigue disfrutando de la obra de Hiro Mashima. Al menos es una aventura de duración discreta, no superando la barrera de las más de 30 horas para los más completistas. En cualquier caso, y si te gusta Fairy Tail, es probable que quieras echarle un ojo a lo que ha preparado Gust, de lo contrario, hay alternativas mucho mejores.
Jugado en PlayStation 5. Copia digital proporcionada por Plaion.